Me apetecía hablaros acerca de una técnica hawaiana de sanación y resolución de problemas.  Lo iré explicando en varios post para que no os canseis. No es una técnica secreta, hay bastante información y algunos buenos blogs que lo explican de forma maravillosa. Aquí simplemente os expondré los datos más interesantes, las bases de la técnica y cómo la utilizo yo.

En este primer acercamiento me gustaría contaros quién lo creo y cómo se dió a conocer.

Mornah Simeona, una Hakuna o guardiana de secretos de Hawai, adaptó una técnica ancestral hawaiana de resolución de conflictos a la sociedad actual. Bastante tiempo atrás cuando en una familia había un conflicto de la índole que fuese, una rivalidad e, incluso, una enfermedad, se convocaba a todo el clan familiar, desde los más allegados a los más lejanos. Todos tenían que acudir a la reunión , lo que a veces demoraba semanas. Nadie podía abandonar la reunión hasta que el conflicto no se hubiese resuelto.

Mornah Simeona y el doctor Ihaleakal Hew Len (en adelante dr. Len), idearon la forma de poder realizar la sanación de manera individual, benefiaciando tanto a uno mismo como a la colectividad.

El dr. Len trabajó durante cuatro años en el Hospital Estatal de Hawai, en el pabellon donde encerraban a los locos criminales más peligrosos. Durante ese período y, sin estar directamente con ninguno de ellos, logró sanarlos a todos.

Cuando empecé, tres años atrás, a indagar sobre esta técnica, me sonó a leyenda urbana. Después, con el paso del tiempo y la experiencia, vi que podía ser real. De hecho hay información acreditada que lo demuestra. A día de hoy no me cabe duda, por experiencia propia, de que así fue.

En Hawaiano Hoo significa Causa y ponopono Perfección. A través de esta técnica tenemos la oportunidad de poner en blanco nuestra página de vivencias, de «arreglar» lo que no es perfecto, aunque no sepamos lo que es, ni cómo se logrará.

El primer precepto de la técnica es HACERSE RESPONSABLE de todo, absolutamente todo lo que hay en nuestra vida. Se trata de una vida que hemos creado nosotros, con actores-amigos, actores-enemigos, actores-familia, etc…

Bajo este precepto nosotros somos responsables de sanar lo que es menos que perfecto, aún sin saber cómo, lo dejamos en manos de la divinidad, el tema se resuelve sólo limpiando. Limpiar memórias le llaman los expertos.

Me acerqué con curiosidad al principio y con incredulidad también pero, con el paso del tiempo y, a pesar de no realizarlo de forma ortodoxa sino a mi manera. Sin haber realizado ningún curso sobre ello. Corroboro que funciona y que es sorprendente la forma de resolver situaciones de esta técnica. Cuando crees saber cómo se va a resolver e incluso cuando crees que no va a resolverse, llegan las sorpresas, de la forma más natural, traída por la vida.

El símbolo del Ho’oponopono es el girasol.

¡Mañana más! 😉

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